¡Bienvenidos nuevamente, amantes de la naturaleza, a nuestra continua exploración de la increíble diversidad aviar de Costa Rica! Hoy dirigimos nuestra mirada hacia los humedales y las costas, donde un ave playera llamativa y vocal, el Playero Aliblanco (Tringa semipalmata), camina y canta.
El Playero Aliblanco es un playerito relativamente grande, el más grande entre el grupo de las «patas largas» del género Tringa. Su cuerpo robusto y sus llamativas marcas negras y blancas lo hacen un ave fácil de identificar. Durante la temporada de reproducción, el Playero Aliblanco luce una corona marrón intenso y una ceja blanca llamativa (supercilio) que contrasta con su espalda oscura. Las partes inferiores son blancas, y algunas aves muestran barras sutiles en el pecho. Pero la estrella del espectáculo es sin duda el ala: una exhibición deslumbrante de rayas negras y blancas audaces visible en vuelo.
Si bien los Playeros Aliblancos están distribuidos por América del Norte y del Sur, Costa Rica ofrece a los observadores de aves la oportunidad de encontrar dos poblaciones distintas:
- Playero Aliblanco Oriental: Estas aves prefieren los marismas salados y las playas de arena, particularmente a lo largo de la costa del Pacífico. Búscalos a lo largo de las costas de Guanacaste y Puntarenas, donde buscan crustáceos, gusanos y peces pequeños.
- Playero Aliblanco Occidental: Esta población prefiere hábitats de agua dulce como marismas, estanques y ríos. Es posible que los veas cerca de las costas del Refugio Nacional de Vida Silvestre Caño Negro o a lo largo de las riberas del Río Tarcoles, donde comparten protagonismo con los imponentes cocodrilos.
¿Un Cantor Disfrazado?
Si bien el pico largo y las técnicas de alimentación del Playero Aliblanco gritan «ave playera», sus vocalizaciones podrían sorprenderte. A diferencia de los chillidos agudos de muchos playeritos, el canto del Playero Aliblanco es una serie sorprendentemente melodiosa de silbidos, pitidos y notas burbujeantes. Este rico y variado paisaje sonoro le ha valido el apodo de «el cantante entre los playeritos».
Observando la Gracia del Playero Aliblanco
En nuestro refugio de montaña, aunque los Playeros Aliblancos no sean nuestros visitantes más frecuentes, siempre existe la posibilidad de avistarlos a lo largo de los arroyos y estanques de las zonas bajas que bordean la propiedad. Los observadores de aves que se aventuren a las costas del Pacífico o el Caribe durante los meses de invierno (de noviembre a abril) tienen más probabilidades de encontrarse con estas aves fascinantes.
Ya sea que los veas caminando con gracia por las aguas poco profundas o volando por el cielo con sus llamativas alas desplegadas, el Playero Aliblanco es un complemento cautivador para cualquier aventura de observación de aves en Costa Rica.
¡No se pierdan nuestra próxima publicación del blog, donde exploraremos otra gema emplumada de las selvas tropicales de Costa Rica!
Para obtener más información, consulte nuestra guía completa sobre las aves de Costa Rica.